Después de terminar la maestría de Finanzas, empecé a dar asesorias financieras a micros y pequeñas empresas de manera personal, a la par estaba como consultor de Best Practices de Finanzas para diferentes unidades de negocio de una gran multinacional. Todo eso fue un gran reto para mí, pero me llenó de un aprendizaje invaluable (aunque también con muchas noches de insomnio) que hoy en día me dió la confianza de poder emprender de manera más profesional mi propia consultoría en temas de Finanzas y blindaje patrimonial y ser promovida como Gestora Financiera en mi trabajo (sí, aún sigo de godín porque disfruto hacerlo).

Al dar asesorías individuales a esos pequeños negocios me di cuenta que el principal problema financiero lo tenían por su mal manejo de finanzas personales, que eso llevaba a que sabotearan su propio negocio, porque al final del día, si no puedes administrar en pequeña escala, no podras hacerlo a gran escala. Hay 5 ejemplos que recuerdo muy bien al empezar mis asesorias:

El primero de una chica que empezaba su negocio de belleza y le estaba yendo de maravilla en terminos de ventas, pero siempre batallaba porque el dinero se le escurría de la manos y nunca completaba, ¿la razón? no separaba sus gastos personales vs negocio, no manejaba algo básico que es un PRESUPUESTO, así que si en lo individual no se administraba pues menos su negocio (ni que decir que no sabía que gastos fijos y variables tenía en ninguno de los 2 rubros), trabajé con ella en realizar un presupuesto personal y del negocio, con algunos indicadores financieros básicos detectamos fugas de dinero importantes que pudimos arreglar y separamos una cuenta bancaria para cada rubro (personal/negocio) así poco a poco empezó a ser más precavida y ahora le va muchisimo mejor. Si, la importancia de las finanzas personales se hizo presente y si no hubiera hecho algo a tiempo, su negocio sería uno más de las estadísticas.

La segunda era de un señor que tenía un puesto de comida, le iba bien pero trabajaba demasidado por muy poca ganancia, nunca había hecho un estudio de costeo de su menú para saber en cuánto debería de dar platillos con un margen de ganancia decente, lo ayudé en desglosar por platillo los costos de los suministros y pudimos determinar una ganancia aceptable y sobre todo poder tener mejores proveedores. Todo empezó a mejorar y estaba muy contento, un día le hablé para dar seguimiento y me dijó que todo se había derrumbado, su hija enfermó y no tenía Seguro de Gastos Médicos Mayores ni Seguro Social y todo el tratamiento era demasiado caro que tuvo que vender lo de su negocio, fue muy triste enterarme de eso, y me sentí responsable por no haberme dado cuenta que debí de incluir al menos un check list de blindaje patrimonial, eso fue lo que me llevó en última instancia a empezar a recomendar los seguros como un básico (ya sea públicos o privados, en el caso de los Gastos Médicos) y más adelante sacar mi cédula como agente para integrarla en mi cartera de servicios.

El tercero fue de un señor de un negocio de suministros de pastelería, le ayudé con la administración de almacenes y platicando me solicitaba opciones para invertir en su retiro, yo en ese momento ya tenía el plan de retiro de mi empresa, la Afore y el de Skandia de ahí fue que empece a comparar más planes de retiro: Seguros Monterrey, Actinver, Profuturo, Sura y Allianz y me decidí por este último para integrarlo también al mío propio y de ahí vi la necesidad de integrar este tema también para mis clientes como una estrategia fiscal, ya que el principal atractivo de los planes de retiro es su deducibilidad. Entonces lo referencié con mi agente y un día me habla y me dice que prefería que yo le diera seguimiento porque el agente no le había explicado bien y se quedó con muchas dudas, al final le expliqué a detalle los beneficios y el cálculo de cuanto le regresarían en su declaración anual y estuvó encantado, ya que regularmente le tocaba pagar, también charlamos a detalle de los portafolios de inversión, en que estaría invertiendo su dinero y como podría él tomar el control sobre ello. Con esa experiencia me di cuenta que muchos agentes son muy buenos vendedores pero no tienen mucha idea (más que les dan en las capacitaciones básicas) sobre fondos de inversiones y estrategias fiscales y empecé a enfocarme en este tipo de productos, ya que mis clientes como este señor, la mayoría era trabajadores independientes o godínez que tenían otro pequeño negocio.

Como cuarta experiencia fue la propia, empujada por mis mismos clientes, que querían más opciones sobre inversiones a corto, mediano y largo plazo, empecé a buscar información y conocí todo el universo Fintech gracias a Héctor Sosa de Adios a tu Jefe y otrás inversiones igual de interesantes, ya había leído varios libros de inversiones entre ellos el de pequeño cerdo capitalista (el dorado de inversiones) pero no tenía un portafolio como tal cuando inicié (parálisis por análisis) ya que no me decidía por un instrumento (estuve casi 1 año en cuentas virtuales de la bolsa de valores). Fue ahí donde empecé a practicar con poco monto y fui aprendiendo más hasta tener mi portafolio actual, separando la paja, identificando estafas y diversificando. Me equivoqué, aprendí y sigo en ese constante conocimiento, ayudando a mis clientes con mi experiencia.

El quinto y último lugar fue la necesidad que tenían los emprendedores que me buscaban para que pudiera ayudarlos a estructurar sus ideas de negocio o los que ya tenían su negocio, como darle forma; de ahí realice mi 1er taller presencial de como crear un plan de negocio desde cero y me fue muy bien, a mis clientes les encantó, sóló que por falta de tiempo y aunado ahora con la pandemia los tuve que suspender, ahorita estoy preparando uno virtual para poder impactar en más emprededores de manera positiva.

Como ven, empecé un viaje de autoconocimiento, preparación (cursos, certificaciones) y reflexión en el tema para poder darle a mis clientes un mayor valor agregado, que al final me llevó a 5 objetivos principales:

1.- Reforzar las finanzas personales en mis clientes: Finanzas sanas + buen produto/servicio = negocios exitosos

2.- Blindaje patrimonial: Seguros que te protejan de situaciones adversas, trasladar el riesgo a un tercero para que el impacto económico no desequilibre tus finanzas y patrimonio.

3.- Portafolio de inversiones: Ahorrar no es suficiente, se necesitan rendimientos y para ello tenemos que invertir, y diversificar esas inversiones es básico para disminuir nuestros riesgos (no poner en una sola canasta todos los huevos).

4.- Planes de retiro: Un plan para tu etapa mas vulnerable hará la diferencia entre un retiro digno y uno lleno de carencias, entre más rápido tomes la decisión mejores serán los resultados que cosecharás.

5.- Planes de negocio: Tener una estructura para asentar tu idea de negocio te ayudará a ver las variables que pueden afectarte, y con eso estar preparado y aprovecharlas a tu favor. Al final la planificación es la base para el éxito.

Gracias por acompañarme en esta aventura y dejarme ayudarte en mejorar tus finanzas para que puedas alcanzar en el menor tiempo posible tu libertad financiera.

ANA MORALES